¿Cómo hacer frente al miedo a viajar en la era Covid-19?

¿Cuánta gente teme viajar en la actualidad?

El famoso COVID-19, ha tenido un gran impacto en la vida de gran parte de la población. Generando de esta manera, cambios en las distintas áreas de la misma.

Vemos como las personas han dejado de actuar y como consecuencia de pensar, del mismo modo en como hacían de forma previa a la aparición del virus covid-19, cosa totalmente lógica, aunque depende del extremo al que se llegue.

¿Cuánta gente tiene pánico a salir a la calle?

¿Cuánta gente tiene miedo a salir a tomar algo?

¿Cuánta gente teme ir a comprar?

Es lógico, como hemos dicho anteriormente, que exista malestar por la incertidumbre que genera el fenómeno que estamos viviendo actualmente.

Aún y así, y de forma inconsciente, muchas personas refuerzan este malestar mediante sus conductas, afectando de este modo a sus cogniciones.

El principal mecanismo que refuerza este miedo, es la evitación. Es decir, si tengo miedo a salir a la calle, lo evito. O si tengo miedo de viajar, lo vuelvo a evitar.

Aunque a corto plazo esto genera un alivio, a medio y largo plazo se provoca que el estímulo fóbico sea cada vez más potente, provocando así que dicho estímulo tenga un papel central en la vida de estas personas.

Así vemos pues, como las soluciones intentadas (evitar), son las que mantienen y aumentan la intensidad del problema.

Cuando se llega a condicionar la vida debido al estímulo fóbico, es cuando nos encontramos ante un problema que requiere de un tratamiento inmediato y específico. Y más, si en la anterior normalidad, éramos personas que debíamos viajar de forma constante, por ejemplo, por negocios.

¿Cómo hacer frente al miedo?  

En primer lugar, tenemos que tener cuenta un aspecto que persigue a gran cantidad de personas, la sobreexposición de información. Este perfil, será más susceptible de generar y sentir un mayor nivel de aversión o miedo a realizar todo tipo de viajes.

Desde el punto de vista psicológico será interesante realizar en estos casos una estimación del tiempo que pensamos o que pasamos informándonos acerca de la pandemia.

1. “Desintoxicar” nuestra mente del exceso de información:

Por ello mismo, el primero de los pasos, consistirá en “desintoxicar” a nuestra mente del exceso de información.

Para ello cogeremos como rutina, establecer unos momentos del día (con un tiempo determinado), para recopilar información acerca de cómo se encuentra la situación actual, junto una elección de fuentes fiables.

2. Tendremos en cuenta las distancias:

En segundo lugar, teniendo en cuenta que cada cambio debe ser progresivo, y en este caso tampoco será distinto, será importante entender que la ansiedad va a jugar un papel de gran relevancia, y por lo tanto, deberemos jugar con esta.

Para ello, tendremos en cuenta las distancias. Una distancia corta, inicialmente desarrollará unos niveles de ansiedad más bajos (con mayor probabilidad). Por ello mismo, se recomendará empezar a realizar desplazamientos cortos, pero siempre ajustados a las circunstancias personales del caso.

No se podrá trabajar del mismo modo, con una persona que requiere de los viajes para trabajar, que con un perfil de persona que no necesite salir de casa por motivo laboral.

Teniendo en cuenta lo dicho anteriormente, vamos a ir avanzando por fases hasta acercarnos a los hábitos existentes previamente a la pandemia del coronavirus siguiendo la normativa vigente. 

Las personas más vulnerables por el virus

No debemos olvidarnos de aquellas personas más vulnerables por el virus. Estas, deberán ser aquellas que con una mayor paciencia, deberán tomarse con más calma la vuelta a la normalidad y siempre centrándose en todos aquellos aspectos sobre los cuales tienen un control.

Tal y como hemos comentado en artículos anteriores, nos referimos a la higiene de manos, uso de mascarillas, distancia de seguridad, entre otros.

En caso de poner en práctica estas modificaciones y no obtener los cambios deseados, como siempre decimos des de el Área de Psicología de la Clínica Arvila Magna en Barcelona será recomendable buscar ayuda profesional para mejorar la calidad de vida y la reducción del malestar que tal situación acaba generando en el sujeto.